Pasando 2 kms. de la Playa Catritre hay un desvío por la Ruta 108 y, recorriendo 12 kms., se encuentra esta pequeña villa que muestra el contraste entre antiguas viviendas pertenecientes a la comunidad mapuche de Curruhuinca y modernas edificaciones.
Existen allí pinturas rupestres y la cascada del arroyo Grande, que es una fuente de agua mineral carbonatada.
En verano se puede disfrutar de las playas del Lago Lácar y acampar en un camping organizado o bien en algunos sectores organizados durante el día. El camino para llegar a esta villa es muy angosto por lo que hay que tener mucha precaución al conducir y no siempre es transitable en invierno. También se puede llegar hasta aquí en una excursión lacustre que parte del puerto del Lago Lácar y dura medio día.