Descripción
Es una excursión de día completo en la que Ud. disfrutará de una amplia variedad de paisajes: el río Mendoza, la planicie en la que se encuentra la ciudad, los valles entre montañas, los picos menores de la precordillera hasta llegar a las más altas cumbres de la Cordillera de los Andes.
El recorrido se inicia en la ciudad de Mendoza, de la que se sale por la ruta Nacional 7, a través de una zona de chacras y viñedos. Luego, siempre bordeando el serpenteante curso del río Mendoza, y con la vista del Cordón del Plata frente a Ud., dejará la zona rural para ingresar a la precordillera. La primera parada será en Potrerillos, un pequeño pueblo de montaña, con residencias de fin de semana de los habitantes de la ciudad de Mendoza. Desde allí se tiene una inmejorable vista del lago artificial formado por el Dique Potrerillos.
El siguiente tramo de la ruta lo conducirá hasta Uspallata, en medio de un paisaje de colores cambiantes, formaciones montañosas muy variadas, y multitud de túneles en la ruta. La recordada película Siete años en el Tibet se filmó en este valle mendocino.
El viaje continúa pasando por pequeños poblados de montaña, Polvaredas, Punta de Vacas, Penitentes, hasta llegar a Puente del Inca, lugar de extrañas formaciones naturales y aguas termales. Se pueden ver las ruinas del primer hotel termal, construido en 1917 y destruido por un alud en 1965.
El Aconcagua, gigante vigía, lo acompañará desde lo lejos en esta parte del camino, mientras Ud. se dirige hacia Las Cuevas, en el límite con Chile. Si las condiciones climáticas y del camino lo permiten, el trayecto continúa por una ruta accesoria hasta el Cristo Redentor, un imponente Monumento a la Paz en medio de las altas cumbres.
El regreso a la ciudad de Mendoza se hace nuevamente por la ruta Nacional 7, asfaltada.
Nota:
La salida es a las 7.30 AM y el regreso aproximadamente a las 7 PM.
Es una excursión apta para personas de cualquier edad y condición física.
No se requiere indumentaria especial, sólo debe recordar que en alta montaña siempre es necesario contar con un buen abrigo, aún en pleno verano.