El 14 de diciembre de 2020 se produjo un nuevo eclipse solar que alcanzó su totalidad en parte de la Patagonia argentina y chilena. También se ha visto en Perú, Uruguay, Paraguay, Bolivia y los océanos adyacentes, pero no en forma total.
¿Qué es un eclipse?
Un eclipse solar es un fenómeno astronómico que se produce cuando la Luna se interpone entre la Tierra y Sol.
Para que suceda, la Tierra, el Sol y la Luna, deben estar alineados o muy cerca de estarlo, de forma que la Luna tape momentáneamente al Sol, impidiendo que sus rayos lleguen a la Tierra.
Esto se visualiza así porque el Sol es 400 veces más ancho que la Luna, pero también está 400 veces más lejos.
Tipos de eclipse
Existen dos tipos de eclipses: el solar y el lunar.
Un eclipse lunar es un fenómeno astronómico que ocurre cuando la Tierra pasa directamente entre la Luna y el Sol, causando que la sombra de la Tierra se proyecte sobre la Luna. Los eclipses lunares son más frecuentes que los solares.
A lo que nos agrega el Dr. Sergio Aldo Cellone:
“Es cierto, pero hay sutilezas. Considerando solamente los eclipses totales, en un siglo hay en promedio más solares que lunares; pero si contamos también los eclipses lunares penumbrales (no totales), en promedio es casi la misma cantidad (un poquito mayor los lunares). La mayor diferencia es porque un eclipse lunar se ve desde medio mundo, y un eclipse solar total se ve desde una región muy chica; por eso, en una misma ciudad, se pueden ver decenas de eclipses lunares en un siglo, pero apenas un eclipse solar total cada 300 o más años”.
Según el Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), la cantidad mínima de eclipses anuales es de cuatro: dos eclipses solares, totales o anulares, y dos eclipses lunares.
¿Dónde pudo verse el eclipse solar de 2020?
El 14 de diciembre de 2020, se pudo ser testigo de un nuevo eclipse solar, cuya franja de sombra más oscura, de miles de kilómetros de largo por solo unos 100 de ancho, benefició a unas pocas localidades de Chile y Argentina.
Esto quiere decir que por más que fue visible en varios países del cono sur, para poder ser testigos del momento en que el Sol es bloqueado en un 100% por la Luna, hubo que trasladarse a alguna de estas pocas localidades patagónicas.
Las personas que se estaban fuera de la franja de los 100 kilómetros, solo vieron el eclipse parcial y cuanto más alejadas estaban de esa angosta faja, vieron el Sol sin ningún cambio.
Si recorremos la franja ampliada en la foto, podremos ver que las localidades de Villarrica y Pucón fueron las grandes privilegiadas en Chile.
En Argentina, la posibilidad de ser testigo del eclipse en su totalidad, se repartió entre algunas localidades de las provincias de Río Negro y Neuquén.
Desde la costa oeste, sobre el Océano Pacífico hasta su paso por la costa este, sobre el Atlántico, los puntos de umbra o totalidad se manifestaron entre las 13.01 y las 13.19 siendo la playa de Las Grutas, provincia de Río Negro, un punto ideal para la observación final.
El punto geográfico donde el eclipse tuvo mayor duración, con 02m10s, se encuentra también en la provincia de Río Negro, en la localidad de Sierra Colorada.
Piedra del Águila, en la provincia de Neuquén, es otra localidad en la que el eclipse solar alcanzó uno de sus puntos máximos.
Por lo general estos fenómenos ocurren en algún punto de la Tierra cada unos 18 meses. Pero lo raro es que un eclipse solar total sea visible desde un mismo lugar de la Tierra. Eso es algo que sucede cada más de 300 años.
El 2 de julio de 2019 se produjo un eclipse solar total que fue visto a lo largo del océano Pacífico, en Chile y, al atardecer, en Argentina y Uruguay.
En palabras de la NASA, «los eclipses solares totales son solo posibles en la Tierra debido a una coincidencia celestial», algo que ya explicamos y graficamos anteriormente.
Además del eclipse solar total del 2 de julio de 2019, que amaneció en el Pacífico sur, tocando tierra en el sur de Chile y finalizando en el extremo sur del Río de La Plata, Argentina y Chile fueron testigos de este mismo fenómeno natural el 26 de febrero de 2017.
En esa ocasión, también los mejores lugares para su observación, estuvieron ubicados en la Patagonia argentina y chilena, lo mismo que sucedió el 14 de diciembre de 2020.
A nivel planetario, este es el recorrido que tuvo:
Fuente: https://eclipse.gsfc.nasa.gov/SEplot/SEplot2001/SE2020Dec14T.GIF
Precauciones a tener en cuenta ante un eclipse solar
Un eclipse solar total es un evento extraordinario y espectacular y poder presenciarlo, un privilegio.
Pero es necesario tomar algunas precauciones para que el goce de un instante no se convierta en un sufrimiento futuro.
El Consejo Argentino de Oftalmología y la Sociedad Oftalmológica de San Juan, en ocasión del eclipse de 2019, nos dejaron algunas instrucciones para cuidar la salud de los ojos de niños y adultos.
- Nunca mirar al sol con los ojos desprotegidos.
- No hacerlo con binoculares o telescopios, salvo que tengan un filtro solar. Consultar a un astrónomo experto.
- Usar gafas especializadas para ver el Sol durante un eclipse solar.
- El único momento en el que se puede mirar al Sol sin filtro es durante el eclipse total.
Aún si la observación al Sol es por un corto período de tiempo, si no se cuenta con la protección correcta, puede dañar la retina de forma permanente. Inclusive puede causar lo que se conoce como retinopatía solar que es el daño en la retina, resultante de la exposición por observar eclipses solares sin los recaudos adecuados.
Cuando se forma parte de estos eventos colectivos, es fácil contagiarse de la algarabía general y distraerse de lo importante. Y si se concurre con niños ¡ellos son lo importante!
Mantenerlos siempre en el radio de atención de los adultos si son muy pequeños y capacitarlos correctamente si ya son mayores, es esencial para no tener que lamentarlo más tarde.
En esta gráfica preparada gracias a los aportes de muchas instituciones responsables de esta información, se pueden ver más claramente las distintas etapas por las que pasa el eclipse y los recaudos que corresponde tomar.