El Dr. Hugo Torres nos cuenta sobre la terapia con fango para el tratamiento de enfermedades reumáticas y de la piel que se realizan en las maravillosas Termas de Copahue, al norte de la Provincia de Neuquén, un sitio que también ofrece múltiples actividades turísticas y que puede ver en Zona Andina.
La diferencia entre la fangoterapia y los baños termales es la concentración de minerales, ya que en los primeros suele ser mayor y en general los de origen volcánico presentan una mayor proporción de azufre.
La terapia con fangos es utilizada como una técnica exclusiva en enfermedades reumáticas y en afecciones de la piel (psoriasis, acné etc.) y en tratamientos estéticos, cuidando el tipo de piel en el que se utiliza, ya que los fangos con alta mineralización en azufre secan e irritan las pieles sensibles.
Sabemos los buenos resultados que se obtienen en las afecciones dermatológicas, ejemplo de ello son algunos estudios realizados por Médicos dermatólogos.
Los fangos pueden utilizarse en patologías reumáticas: artrosis, artritis, reumatismo de partes blandas, etc. ya que producen calor superficial logrando disminución del espasmo muscular, disminución de la rigidez articular y una posible acción antiinflamatoria.
Según algunos estudios, reponen magnesio y otros minerales para la formación de sustancias importantes para el buen funcionamiento de los músculos reduciendo el dolor muscular.
Además, los fangos producen activación de ciertas enzimas, como también de la incorporación de sustancias llamadas oligoelementos y que son indispensables para ciertas funciones metabólicas, el zinc, cobre, cobalto, manganeso, etc., son algunos de ellos.
En general los tratamientos con fangos pueden ser realizados en forma de mascarillas o aplicaciones faciales, en forma oclusiva o suboclusiva, dependiendo de la habilidad del paciente y de la afección a tratar.
Las aplicaciones de mascarillas, en general, son recomendadas dos veces por semana o dependiendo de la afección tratada, en el caso de los fangos que son utilizados en forma oclusiva, para las patologías crónicas reumáticas, se las puede realizar una vez por día y en general con temperaturas que oscilan entre 35 y 38 grados, logrando así una vasodilatación local que favorece la absorción mineral.
La fangoterapia, según muestra la experiencia, no tiene grandes contradicciones, salvo que no debe utilizarse en heridas abiertas, no utilizar fangos muy calientes en procesos agudos, por lo que se aconseja siempre que el paciente quiera hacerse fangos o tratamientos con aguas termales, este debe ser siempre supervisado por él medico.
La fangoterapia en las Termas de Copahue es un tratamiento complementario válido, placentero y una experiencia inolvidable.
Queremos agradecer la ayuda incondicional del Sr. Marco Forlini del Ente Provincial de Termas del Neuquén.