Remontando las nacientes del río Azul hacia la cordillera, aproximadamente a 9,5 km. de la confluencia con el Arroyo Blanco, se observa un fenómeno poco usual: su encajonamiento, por espacio de 1 km. aproximadamente, en forma longitudinal, en un espacio de un metro de ancho y cuarenta de profundidad.
Existen excursiones programadas con guía, que facilitan el acceso al lugar. Hay un refugio que brinda alojamiento (pernocte con bolsa de dormir) y comida (plato fuerte de montaña).